Desinfección eficaz del agua de tu piscina: conoce los beneficios del ácido isocianúrico.

El agua de las piscinas nos llama la atención por su transparencia y su brillo tan apetecible, parece magia ¿verdad? En cierto modo lo es, pero no siempre resulta sencillo.

El mantenimiento del agua de las piscina es una de las preocupaciones de aquellos afortunados que disponen de una en casa. No siempre es fácil, pues existen muchos productos que deben combinarse y administrarse de manera correcta y precisa para conseguir el efecto deseado.

Uno de los productos químicos  más conocidos para el mantenimiento del agua es el cloro, pero este necesita compañeros, quizá no tan conocidos, para trabajar correctamente y desinfectar eficazmente. Es el caso del ácido isocianúrico o CYA.

ÀLEX

¿Para qué sirve?

El ácido isocianúrico, en su medida justa, tiene el poder de estabilizar el nivel cloro y se usa en piscinas al aire libre o interiores (cloradas, claro). El cloro, un potente desinfectante que todos conocemos, puede verse afectado por los rayos UV, degradando así su efecto. El CYA funciona como escudo y evita que el cloro se rompa, gracias a su poder de absorción de los rayos del Sol.

Este producto facilita el tratamiento químico, al estabilizar el nivel de cloro, su mantenimiento se realiza con menos esfuerzo y tiempo, pues el mantenimiento puede realizarse en períodos más largos. Por ejemplo, en lugar de ajustar el producto químico a diario, permite que se realiza 1 o 2 veces por semana.

¿Què niveles debo mantener?

El nivel de ácido isocianúrico ideal es de unos 30, 50 ppm, en otras cantidades puede ser contraproducente o peligroso. A la vez, se debe mantener continuamente una concentración de 1,5 a 2 ppm de Cloro Libre. De esta forma evitamos que el poder desinfectante del cloro disminuya.

Para su eficacia, también debemos tener en cuenta el pH que debe mantenerse entre 7 y 7.6.

¿Por qué es importante su control?

A pesar de no ser tan conocido como el cloro, el CYA resulta imprescindible para los profesionales del sector que lo recomiendan a particulares. Esto provoca un uso popularizado que debe controlarse, porque aunque resulta muy eficaz, si se usa de manera incorrecta puede suponer un riesgo para la salud. Además, con su popularización, emergieron falsificaciones potencialmente peligrosas.

Existe una relación directa entre el aumento de los niveles de ácido isocianúrico y el tiempo de eliminación de las bacterias presentes en el agua de la piscina. De modo que si los niveles están por encima de lo recomendado, puede disminuir el efecto de desinfección del cloro y suponer un problema de salud para los bañistas que pueden ser afectados por estas bacterias.

Como por ejemplo el Cryptosporidium parvum, un microorganismo que afecta a la salud intestinal de los seres humanos. Se encuentra en aguas sucias, que carecen de un mantenimiento correcto. Además, es resistente a algunas concentraciones de cloro, debemos controlarlo, estabilizarlo y complementarlo con un nivel correcto de CYA.

Así que, debes ser cuidadoso si utilizas producto químico para el mantenimiento del agua de tu piscina y, como ya sabes, en Reindesa estamos a tu disposición para la resolución de dudas. Visítanos en nuestra tienda más cercana o contacta con nosotros.