6 pasos clave para poner a punto la piscina

Con la llegada del buen tiempo, vienen también las ganas de ir preparando la piscina para la temporada, ¿verdad? Nuestra recomendación siempre es ser previsor y empezar a poner a punto la piscina cuando aún estamos en primavera. Así, tenemos más margen para dejarla lista y perfecta, haciendo reparaciones de mantenimiento si así se requiere. Además, déjanos decirte que si nos hiciste caso y la hibernaste en otoño o incluso la climatizaste y has disfrutado de ella en los meses fríos, ¡prepararla será aún más fácil! ¿Empezamos con los 6 pasos clave para poner a punto la piscina?

1. LA TEMPERATURA DEL AGUA DEBE ESTAR A 12ºC

Esta es la temperatura a la que se suele recomendar que esté el agua para la puesta a punto de la piscina, idealmente que no supere los 15ºC. ¿El motivo? Si esperamos más tiempo a reabrir la piscina, una mayor temperatura provocará la proliferación de bacterias, algas y hongos de forma más rápida (teniendo que añadir un paso más en la puesta a punto), y deteriorando la calidad del agua. 

2. RETIRA Y LIMPIA EL PROTECTOR O CUBIERTA DE PISCINA

¿Has mantenido cubierta tu piscina con un cobertor o lona? ¡Genial! Es momento de retirarla, limpiarla bien y guardarla hasta el fin de la temporada (o hasta que quieras protegerla en pleno verano para evitar la evaporación los días que no te bañes). Si los tienes, retira también cualquier flotador anticongelante.

3. COMPROBACIÓN DE LOS ACCESORIOS SUMERGIDOS

Nos referimos a cestos, skimmers, rejillas, escaleras o el canal (esto último en caso de tener una piscina desbordante), puesto que son lugares en los que se pueden formar hongos o algas. Revisarlo también nos permite asegurarnos de que todo está en condiciones o si bien se necesita cambiar o fijar mejor alguna pieza.

4. NIVELAR EL PH DEL AGUA DE LA PISCINA

Ya sabrás que el nivel de pH de la piscina debe estar entre el 7,2 y el 7,6. De no ser así, deberás nivelarlo porque los productos químicos (desinfectantes, alguicidas…) que añadas posteriormente no van a funcionar correctamente. Además, si el valor es superior al recomendado hay riesgo de sufrir irritación cutánea y ocular. Si, en cambio, el nivel es inferior, el vaso de la piscina se corroerá y deteriorará.

Si tienes una piscina con electrólisis salina, debes comprobar que el nivel de concentración de sal es el correcto, unos 4,5g por m3 de agua, dato que podemos comprobar en el equipo clorador salino.

5. LIMPIAR EL FONDO Y LAS PAREDES

Para este paso, podemos ayudarnos con un robot limpiafondos automático que lo haga por nosotros en poco tiempo, o bien de forma manual cepillando las líneas de flotación, paredes y escaleras para eliminar cualquier rastro de suciedad. Si has mantenido en condiciones tu piscina durante el invierno, este paso no debería suponer demasiado esfuerzo.

6. PON EN MARCHA EL SISTEMA DE FILTRADO

¿Todo limpio y balanceado? Perfecto, pues pongamos en marcha el sistema de filtración de la piscina. Cerciórate de que la bomba funciona bien y que hay una correcta circulación del agua por el filtro. En caso de haberlo dejado parado durante el invierno, es esencial comprobar que no está clavado. Puedes dejar el sistema funcionando por unas 24h para comprobar que todo está en orden y el agua se reequilibra.

Para las demás veces, puedes calcular el tiempo de filtración necesario guiándote por la fórmula: Temperatura del agua / 2 = Tiempo de filtración, de modo que si el agua está a 15ºC, el tiempo de filtrado será de 7,5h.

¿Y los filtros? Si es de arena (sílex), comprueba la carga filtrante abriéndolo. Si está apelmazado, deberemos usar productos desincrustantes para filtros de arena. Si la arena está bien, basta con verificar si hace falta añadir mayor carga filtrante. En los filtros de cartucho, debemos retirar el cartucho, limpiarlo bajo el grifo o con manguera, y reemplazarlo si está muy deteriorado.

¿Lo tienes? ¡Pues ya sabes como poner a punto la piscina y dejarla lista para la temporada de verano! Recuerda que desde marzo/abril hasta junio, es importante ir revisando periódicamente todos los parámetros (pH, cloro y producto químico, o bien el nivel de sal) para que el agua no se vuelva a deteriorar antes de que definitivamente llegue el verano. ¡Solo así nos aseguraremos de que el agua de la piscina está en óptimas condiciones para su disfrute!